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CAMBIAR SITIOLa piel grasa es una afección cutánea común, pero ¿sabías que la producción de grasa no es la misma durante todo el año? El clima húmedo puede hacer que tu piel se vuelva más grasa, y si esto te afecta, puedes tomar algunas medidas. Veamos cómo controlar la piel grasa en climas húmedos para aquellos que viven en la costa o el sur de Chile o incluso si vas de vacaciones a un lugar con esta característica.
Las pequeñas glándulas productoras de aceite que se encuentran en los folículos pilosos se llaman glándulas sebáceas. Cuando estas glándulas producen cantidades excesivas de aceite, llamado sebo, la piel puede tener brillo y sensación grasosa. Aunque no se sabe con certeza por qué algunas personas producen más sebo que otras, la piel grasa es común.
Varios factores pueden provocar una mayor producción de sebo, como los cambios hormonales, pero para algunas personas, la humedad puede ser un factor desencadenante. La producción de sebo puede variar según la humedad ambiental y la época del año. Las investigaciones demuestran que la secreción de sebo aumenta y fluye con mayor facilidad con temperaturas más altas, posiblemente debido a su mayor fluidez.
La piel grasa puede provocar brotes de acné, así como poros dilatados u obstruidos, lo que favorece el crecimiento de bacterias. Estos síntomas se combinan, ya que unos poros dilatados implican una mayor producción de sebo.
Si notas que tu piel se vuelve grasosa con el clima húmedo, hay cosas que puedes hacer para ayudar a controlarlo.
Mucha gente piensa que resecar la piel disminuye la producción de grasa. Sin embargo, esto no es cierto. Los limpiadores faciales agresivos pueden irritar la piel y aumentar aún más la producción de sebo. En su lugar, usa un limpiador suave como el Limpiador Facial Diario para Piel Grasa de Cetaphil.
Aquí están nuestros mejores consejos para cuidar la piel grasa en climas húmedos:
Tu rutina de cuidado de la piel debe ser regular, suave y respetuosa con tu piel. Evita productos demasiado agresivos, abrasivos o que resequen.
A continuación, te presentamos un régimen fácil de seguir para comenzar:
Para mantener tu piel grasa sana y sin irritaciones, evita los productos para el cuidado de la piel pesados y con emolientes. En su lugar, usa productos que favorezcan tu piel.
Hay dos frases clave que debes tener en cuenta al elegir productos para el cuidado de la piel: "libre de aceite" y "no comedogénico". Cuando tu piel se vuelve más grasa en verano, lo último que quieres es usar un producto que añada más grasa. Prueba Water Gel Restaurador Optimal Hydration de Cetaphil, una crema hidratante a base de agua.
El término "no comedogénico" significa que un producto no obstruye los poros. Los poros obstruidos se dilatan y se hacen más visibles. También pueden provocar brotes de acné y alterar el equilibrio bacteriano de la piel, dejándola más propensa a la irritación.
Lo que comes y bebes también puede jugar un papel en el control de la piel grasa en climas húmedos.
Algunos estudios sugieren que una dieta muy rica en grasas y carbohidratos podría aumentar la producción de sebo y que los alimentos con un índice glucémico alto, como el pan blanco, los copos de maíz y las bebidas azucaradas, pueden tener consecuencias desagradables para la piel.
Si tienes la piel grasa, intenta incluir en la dieta alimentos con un índice glucémico bajo, especialmente alimentos ricos en antioxidantes como frutas frescas, verduras, frijoles y avena, para ver si esto ayuda.
Cuando llegue el calor sofocante, asegúrate de beber suficiente agua. Mantenerte hidratado es una de las mejores cosas que puedes hacer por tu salud, ya que ayuda a reponer los líquidos perdidos. Mantenerte hidratado también puede ayudar a mejorar el grosor y la densidad de la piel.
¿Sabías que una persona promedio se toca el rostro sin querer 23 veces por hora? 10 Aunque este simple gesto pueda parecer inofensivo y natural, tocarse la cara con las manos puede propagar suciedad, grasa, gérmenes y bacterias. Así que recuerda lavarte las manos con regularidad y trata de no tocarte la cara con demasiada frecuencia.
Ahora tienes algunos consejos útiles para controlar la piel grasa en climas húmedos. Con una buena rutina de cuidado de la piel, productos suaves y algunos cambios en tu estilo de vida, podrás disfrutar del clima húmedo con tranquilidad.